Alexis Márquez ha dejado su cargo como director técnico del Envigado Fútbol Club, convirtiéndose en el quinto técnico en abandonar su puesto en el fútbol profesional colombiano durante esta temporada. A su salida se suman las recientes partidas de entrenadores como Pablo Repetto, Arturo Reyes, Alfredo Arias y Néstor Craviotto, lo que refleja la inestabilidad que ha caracterizado a varios equipos en la presente campaña del FPC sobretodo los que están cerca del descenso.
Márquez, quien asumió el reto de dirigir al Envigado con el objetivo de mantener al equipo en una posición competitiva, no pudo obtener los resultados esperados. A pesar de contar con un grupo joven y talentoso, los resultados en el torneo no fueron los mejores, lo que llevó a la directiva del club a tomar la decisión de buscar un cambio en la dirección técnica. Esta tendencia de despidos ha sido recurrente, con varios clubes que buscan resultados inmediatos.
Un nuevo técnico se despidió del futbol Profesional colombiano y deja a su equipo en descenso
La salida de Márquez se une a la de Néstor Craviotto, que dejó su cargo en Jaguares Fc, Pablo Repetto, quien dejó Atlético Nacional, Arturo Reyes, removido de Junior de Barranquilla, y Alfredo Arias, ex técnico del Independiente Santa Fe. Estos movimientos han generado un debate sobre la presión que enfrentan los entrenadores en el fútbol colombiano, donde los proyectos a largo plazo parecen quedar en segundo plano frente a los resultados inmediatos.
Envigado, un club conocido por su apuesta en las divisiones inferiores y por ser la cuna de grandes talentos del fútbol colombiano, ahora se enfrenta a la tarea de buscar un nuevo técnico que pueda llevar al equipo a mejores resultados y consolidar su proyecto deportivo. La expectativa es que la llegada de un nuevo estratega logre sacar al equipo de la zona baja de la tabla y maximizar el potencial de sus jóvenes jugadores.
Con la salida de Alexis Márquez, se completa una lista de entrenadores que han tenido que dar un paso al costado en medio de una temporada turbulenta para varios equipos del fútbol colombiano. La búsqueda de estabilidad y resultados sigue marcando el ritmo en el campeonato, dejando poco margen de maniobra para los técnicos que no logran cumplir con las expectativas.
